Estaba viendo un programa de ciencia que resolvía alguna de mis más inquietantes cuestiones sobre lo que somos o lo que nos compone, así que me pareció interesante prestarle atención para poder aprender un poquito más y hacer un breve resumen aquí, para la posteridad o algo...
El programa hablaba de los parásitos en nuestro cuerpo porque están en todas partes, básicamente.
La verdad es que estamos cubiertos por seres vivos. Noventa trillones de células bacterianas, de hecho, sólo somos un 10% humano, el resto de células de nuestro cuerpo son bacterias. Sólo con respirar nuestros pulmones se llenan de hongos que están en el aire, se llaman "pneumocistys", son inofensivos siempre que tengamos un buen sistema inmunológico.
Cambiamos de escenario, y nos vamos a nuestro baño que es una gran fuente de bacterias. ¿Por qué? Porque resulta que las tazas tan modernas que han inventado para evitar salpicaduras hacen justamente lo contrario. Cuando tiramos de la cadena puede dispersar estafilococos y E. Coli a tres metros, así que llega por todas partes e incluso puede llegar a nuestro cepillo de dientes, cuchillas de afeitar y todo lo que tengamos a mano en en lavamanos o en el estante de la pared. Véanse las capturas:
(Con luz negra se aprecia los puntitos brillantes (bacterias) por el baño)
En raras ocasiones la infección por estafilococos pueden causar inflamación del cerebro y el E. coli puede dañar nuestros riñones. La buena noticia es que nuestro sistema inmunológico nos evita esta infección siempre que sea "poca". Para resumir, cuando vayáis al baño, bajad la tapa antes de tirar de la cadena y guardad el cepillo y demás en el armario.
Tener un gato también tiene sus riesgos, sobretodo si hay una embarazada en casa. En la arena de gato se concentran muchas especies de bacterias, una de las más comunes es la llamada "toxoplasma gondii" y puede resultar mortal. Así que tu gato, adorable pero letal, levanta partículas de caca que tu respiras:
Los parásitos del "toxoplasma" se abren camino hasta el cerebro donde se cree que estimulan la segregación de dopamina, una sustancia química que inhibe el miedo y puede inducir a ser imprudente, pierdes el miedo al riesgo. Éstas pueden afectar a nuestra salud y a nuestra personalidad, así que si eres un imbécil quizá sea por culpa del gato...
A veces me pregunto quién es más parásito, las bacterias o nosotros los humanos.
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